Las agencias de detectives privados a quienes se les ha encomendado la labor de búsqueda y localización de personas, adquieren un compromiso moral y profesional en tan importante misión, pues detrás de cada caso, generalmente hay una angustia familiar por desconocer el paradero del ser querido, no siendo fácil para los interesados asimilar la espera mientras se realizan las pesquisas, pues cada segundo representa una insostenible carga emocional que vulnera la seguridad de todos, cliente y objetivo.
¿Por qué contratar detectives?
En estos casos, el detective privado debe en primer lugar conseguir información acerca de las últimas actividades de la persona extraviada, así como de sus características fisionómicas y señas particulares como tatuajes, cicatrices y cosas que lo individualicen, a los efectos de observar tales detalles para identificarlo y ubicarlo.
Así mismo, debe instruir a los familiares de la necesidad de acudir a los órganos de seguridad a los fines de reportar la desaparición, pues puede configurar un delito el hecho, si ha sido forzada por terceros. En este caso, las agencias de detectives privados, mantienen comunicación efectiva con los órganos de seguridad a fin de realizar un trabajo conjunto.
Por otra parte, existe también la desaparición voluntaria de personas, en las que no existe un tercero ni una situación forzada. En estos casos, los detectives privados siguen el rastro del desaparecido, hasta dar con su paradero con el debido registro. Entrevistas con las personas allegadas, compañeros de trabajo, pareja sentimental, vecinos y conocidos aportan información que generan indicios en relación a su ubicación.
De cualquier manera, la desaparición de personas es un tema frecuente en muchas partes del mundo, pero afortunadamente contamos con Detectives para minimizar el impacto de hechos de esta naturaleza, pues el trabajo organizado y profesional de esta agencia hace posible la resolución d la investigación en el menor tiempo posible y con todos los cuidados que se deben tener para asegurar un final feliz.